7 de marzo de 2012

Esos 2 minutos serán los mejores de mi vida.




Enamorarse de una persona duele, siempre. Lo pasas mal, por que el amor es una cosa muy grande, por lo cuál para conseguirlo, no es fácil.
Cuando te enamoras de una persona que tienes a tu alcance a tu lado, eso es algo extraordinario, por que le puedes decir lo mucho que la quieres, aunque falles, se lo pudiste decir, tuviste la oportunidad. Y si sale bien, podrás estar plenamente feliz, por que puedes tenerle a tu lado, y demostrarle todo lo que sientes. 
El problema, es cuando... Como me cuesta escribir la palabra DISTANCIA. Es la palabra que menos me gusta, lo peor que pueda existir. Cuando te enamoras de una persona que es inalcanzable, eso es peor créeme. ¿Sabes lo qué duele pensar que lo más probable es que él jamás te conozca; que jamás sonría al verte, que no piense en ti, aunque sea una milésima de segundo. Que por muchos Te quiero, que le diga no los oirá. Por culpa de esos kilómetros que me separan de ti.
Duele, muchísimo. Enamorarte, y saber que lo más cerca que lo tendrás será a unos 50 centímetros, pero en tu pantalla, en fotos, en vídeo. 
Duele, pero jamás me cansaré, por que esta vida me enseño muchas cosas y una de ellas fue, que los sueños con esfuerzo pueden cumplirse, que no hay que rendirse. 
Por eso jamás me rendiré, por que sé que algún día podré decirte lo mucho que te quiero, y que me oirás decírtelo, y te podre tener a 50 centímetros, aunque sea 2 minutos. No me importará por que esos dos minutos no se me olvidarán en la vida.
Esos 2 minutos serán los mejores de mi vida.